Un sentido del olfato muy poco desarrollado y pobre visión a su disposición en las aguas marinas, hicieron que las ballenas desarrollaran el sonido como forma de comunicarse entre sí. Se cree que las ballenas utilizan el sonido para la eco-localización, un tipo de sonar, que les permite a las ballenas localizar peligros y otros animales.
Esta técnica funciona de la siguiente manera:
Una ballena produce un sonido que envía a través del agua y rebota en objetos o animales. Las ballenas tienen una capacidad especial para obtener información sobre la forma y la distancia del objeto con que el sonido chocó.
El sonido también se utiliza para la reproducción en algunas especies de ballenas donde se desarrolla un canto especial.
Existen varias vocalizaciones o sonidos producidos por las ballenas, y cada uno, se cree, tenga un propósito diferente, incluyendo aquellos que se usan para la comunicación y la socialización.